El talento no desaparece, solo necesita el contexto adecuado
Anoche, viendo cierto partido de fútbol, me pregunté: ¿por qué hay jugadores que brillan en un equipo, pero en otros simplemente no funcionan?
La respuesta, en términos futbolísticos, parece obvia: el planteamiento táctico que potencia sus fortalezas y la forma de trabajo del día a día que impulsa su rendimiento.
En el mundo laboral pasa lo mismo. ¿Cuántas veces hemos visto colaboradores pasar sin pena ni gloria por una empresa, solo para destacar enormemente en su siguiente empleo?
No siempre es un problema de falta de talento. Muchas veces, el liderazgo y la cultura organizacional les han fallado. No supieron aprovechar sus fortalezas, no encontraron la forma de potenciar su crecimiento ni de ayudarles a superar sus áreas de oportunidad.
Hay organizaciones donde la mentalidad es rígida: “así son las cosas”. Pero liderar equipos diversos es un arte. Los verdaderos ganadores no solo buscan talento, sino que crean el entorno adecuado para que brille.